Contemplar el sol y sus colores cuándo empieza a aparecer, al amanecer o a ocultarse, al atardecer! es una experiencia fantástica! hace bien a nuestro espíritu!
“No temas, claro sol, que tú presencia olvide, pues por fe la estoy mirando” decía el poeta sevillano Gutierre de Cetina.
Me encanta fotografiar el sol en esos momentos del día: